Imputado un sargento tras una querella por retirar multas

El juzgado de instrucción número 3 de Marbella ha citado en calidad de imputado al sargento de Benahavís tras una querella presentada por la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) en la que se le acusaba de una serie de supuestas irregularidades como la retirada de una denuncia interpuesta por un cabo de su puesto y de suspender multas de tráfico a familiares suyos. En el auto, al que tuvo acceso este periódico, se acordó la incoación de diligencias previas al tratarse de "hechos que pudieran ser constitutivos de delitos".

En la querella, también conocida por Málaga Hoy, la AUGC relata una serie de presuntas arbitrariedades por parte del sargento. En una de ellas, teóricamente, se expone que existen denuncias interpuestas por el sargento y otros guardias civiles a diversos bares en virtud de la ley antitabaco entonces vigente. A uno de los establecimientos, propiedad de un familiar del citado sargento de puesto, se le requirió la documentación de la máquina expendedora así como el listado de precios. El bar, según consta en la denuncia, carecía de licencia para la venta de tabaco y los precios excedían de lo permitido por la ley, por lo que se redactó la correspondiente infracción, que consta en el registro de salida del cuartelillo el día 20 de julio. Sin embargo, según la AUGC, en el Comisionado de Tabaco no tienen referencia de ésta, "aunque otras del mismo puesto sí han tenido curso legal y por ende han sido sancionados". Además, en el registro interno el número de esa denuncia contra el local se correspondía en teoría con la sustracción de un vehículo a motor y en la querella se añadía que uno de los cabos de la Guardia Civil que prestó declaración sobre los hechos negó que la letra de esa denuncia tramitada fuera la suya, sino la del sargento primero jefe del puesto.

En la querella también se relata que un guardia civil alumno denunció a un vehículo por no haber pasado la ITV. Al día siguiente, según consta en la denuncia, la persona objeto de la infracción telefoneó al cuartel de la Guardia Civil asegurando que era amigo del alcalde y de su mujer y que deseaba hablar con el sargento "para ver si le podían quitar la multa". Según la AUGC, después de esa llamada, en la Jefatura de Tráfico no existía ese boletín de denuncia ni tampoco constaban el titular ni el vehículo, aunque, siempre según la querella, el documento que se archivó en el puesto de Benahavís figuraba como enviado.

Tras tener constancia de la imputación del sargento de Benahavís, desde la AUGC solicitaron al director general de la Guardia Civil que abra una investigación "sobre éste y otros hechos que fueron denunciados por la delegación de Málaga y que no obtuvieron respuesta por parte de la Comandancia de Málaga". "Confiamos en la Justicia desde la premisa de la presunción de inocencia y esperamos que actúe sin tener en cuenta uniformes", aseguraron desde la AUGC.

La AUGC puso estas presuntas irregularidades en conocimiento de la Comandancia el 4 de julio de 2011. Unos meses después recibió un CD que contenía, siempre según la querella, el expediente sancionador incoado por un alto mando contra el sargento. El capitán instructor del caso consideraba que las presuntas irregularidades cometidas podían ser constitutivas de falta grave o muy grave. A raíz de ese informe, uno de los asesores jurídicos de la Guardia Civil consideró, siempre según la AUGC, que las supuestas irregularidades cometida deberían ser sancionadas como una falta grave, por lo que al pasar ya dos años de los hechos estaba prescrita. El director general de la Guardia Civil, tras tener conocimiento del dictamen de su asesor jurídico, estimó, según la querella, que no existían por tanto "indicios de la perpetración de falta muy grave que propuso el capitán". No obstante, este oficial había asegurado en sus conclusiones "que independientemente de que los hechos examinados pudiesen estar incluidos en los dos artículos de la ley disciplinaria" procedía derivar el caso al Ministerio Fiscal "dado que alguno de los mismos, relatados, investigados y constatados podrían presentar tintes de ilicito penal", algo, que según la AUGC, no llegó a producirse.

Fuente: malagahoy.es