"Ruido de sables en la Guardia Civil"

La Cúpula militarista prepara el mayor golpe contra los derechos de los guardias civiles.


La Dirección General de la Guardia Civil continúa con su política de remilitarización de la Institución y el hostigamiento a las Asociaciones Profesionales, únicos representantes legales y legítimos de los trabajadores de este Cuerpo Policial. El ministerio del Interior y el de Defensa aprovechando que se está elaborando una reforma del Régimen Disciplinario de las Fuerzas Armadas, por la puerta de atrás están intentando colar una modificación del Régimen Disciplinario de la Guardia Civil. Una modificación que de aprobarse, supondrá de facto el fin del asociacionismo en la Institución. El mayor retroceso de la historia del asociacionismo.

Para AUGC la reforma que pretende la Dirección General es un intento de cercenar el derecho de asociacionismo en la Guardia Civil. Pretenden corregir a la propia Justicia que sistemáticamente ha dado la razón a los servicios jurídicos de AUGC cada vez que han recurrido los expedientes disciplinarios que han impuesto a sus representantes. En definitiva tratan de impedir a los dirigentes de la Organización que hagan uso de la libertad de expresión y reunión reconocido en la Constitución y en su Ley de Derechos y Deberes.
De consumarse esta modificación del Régimen Disciplinario AUGC lo considerará un ataque frontal a nuestras legítimas funciones como representantes de los trabajadores de la Guardia Civil ya que condenaría a las Asociaciones Profesionales a ser meros títeres de la Dirección y la Cúpula militarista. Un papel que, al menos, AUGC no está dispuesta a jugar. Una reforma que supondría por tanto la salida de la Organización de cualquier ámbito oficial, y la vuelta a las tácticas del pasado cuando estuvo condena a la clandestinidad. Esto supondría un grave retroceso en la Guardia Civil, que no sólo afectara a los derechos que los guardias civiles tienen como trabajadores, sino también en el propio servicio que se presta a los ciudadanos.

AUGC se opondrá a la aprobación de este borrador en el próximo Pleno del Consejo y ya anuncia que de seguir adelante buscará cuantos apoyos políticos sean necesarios, además de convocar a todos los guardias civiles, afiliados o no de nuestra Organización a una manifestación en Madrid frente a la Dirección General. Concentración que será aún más numerosa que las anteriores, porque esta remilitarización será la gota que colme el vaso de la paciencia de unos trabajadores castigados duramente con los recortes económicos que han sufrido y a los que ahora se les quiere restringir sus derechos laborales.
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