4 años de cárcel al guardia civil de Castellón que traficaba con cocaína

Cuatro años y medio de cárcel. Esta es la condena impuesta por la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Castellón contra el sargento de la Guardia Civil Óscar C.C., que fue sorprendido en junio del 2012, junto a dos ciudadanos colombianos, con medio kilo de cocaína en el interior de su vehículo particular, según pudo saber Mediterráneo.

Los otros acusados deberán cumplir una pena de prisión de tres años cada uno como autores responsables del mismo delito.

El tribunal ha aplicado en el caso del guardia civil la agravante de prevalimiento, ya que en su condición de agente de la autoridad se aprovechó de los beneficios que suponía su función de autoridad pública para delinquir.

El juicio se celebró el pasado 14 de junio. En su defensa el guardia civil explicó al fiscal que se había infiltrado entre los capos de la droga para conseguir hacer méritos en su profesión y ganarse, de este modo, el respeto de sus superiores. Esta versión, que ha sido analizada por los magistrados de la Audiencia Pedro Garrido, Esteban Solaz y Aurora de Diego, no ha resultado finalmente creíble. Para el tribunal el acusado se dedicaba claramente al tráfico de cocaína en la provincia y, para ello, se valió de su condición de guardia civil para evitar ser descubierto por sus propios compañeros. El ahora condenado se valió de unos walkie talkies que había sustraído del cuartel de Almassora para conocer en todo momento los movimientos y servicios de todas las patrullas de la provincia. Asimismo, en el instante de la detención portaba encima una pistola.

El tribunal lo condena, además, al pago de una multa de 29.000 euros que es el valor que alcanzaba la droga que le fue descubierta en el instante de su arresto.

LOS HECHOS // Tal y como ha quedado probado en la sentencia, los hechos se produjeron el 15 de junio del 2012. La Guardia Civil estaba siguiendo la pista a su compañero desde hacía meses tras sospechar que este se dedicaba al tráfico de drogas. Fue en el peaje de la AP-7 de Benicarló, cuando el Equipo contra la Delincuencia Organizada y Antidroga (Edoa) de la Benemérita dio el alto al vehículo del acusado. Este, tratando de evitar su detención, se dirigió a sus compañeros y les dijo: “¿No me conocéis?”. El sargento de la Guardia Civil portaba medio kilo de cocaína, por lo que fue detenido inmediatamente. H
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